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Solución sencilla: jabón lavavajillas
Aunque existen innumerables productos en el mercado que prometen limpiar las lentes de forma impecable, la Asociación Americana de Optometría recomienda la solución más simple: el jabón lavavajillas. El Dr. Geist aconseja: "Lo mejor es lavar las gafas bajo agua corriente tibia, aplicar una gota de jabón lavavajillas en las lentes con la yema de los dedos para hacer espuma, enjuagar con agua y secar con un paño de microfibra limpio y suave".
"Limpiar las lentes con el dobladillo de una prenda polvorienta es un mal hábito, ya que puede rayarlas."
Lentes de vidrio vs. lentes de plástico
La mayoría de los estadounidenses que compraron gafas graduadas el año pasado optaron por lentes de plástico. La creciente preocupación por la seguridad ha reducido la popularidad de las lentes de vidrio. A diferencia de las lentes de vidrio, las lentes de plástico, que son más suaves, se rayan con facilidad.
"Una vez que se produce un rayón, no hay forma de eliminarlo", afirma el Dr. Geist. Secar las gafas antes de limpiarlas también es un mal hábito, ya que las superficies secas son más ásperas que las húmedas.
Limpiar las lentes con un paño de microfibra durante la jornada laboral está bien, pero no sustituye a una limpieza a fondo. Tampoco es suficiente empañar las lentes antes de limpiarlas. El Dr. Geist añade: "Algunas personas empañan las lentes y luego las limpian con papel higiénico, servilletas o pañuelos de papel, pero estos materiales son ásperos y pueden dejar residuos".
Aspectos a tener en cuenta
La mayoría de las lentes tienen un revestimiento protector, por lo que no deben entrar en contacto con amoniaco, lejía, vinagre o limpiadores de vidrio. El Dr. Geist advierte: "Estas sustancias químicas pueden debilitar o eliminar el revestimiento. Las burbujas que aparecen en las lentes se deben al limpiador".
La acumulación diaria de aceites provenientes de las manos, las cejas y la cara puede afectar la eficacia de las lentes. El hábito de dejar las gafas en un tocador o lavabo donde flotan los componentes de los perfumes y lacas para el cabello también contribuye a la acumulación de impurezas en las lentes. La Asociación Americana de Optometría recomienda lavar las gafas a diario por la mañana, prestando atención a las patillas y la montura, donde tienden a acumularse los productos para el cabello y el maquillaje.
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